El uso de big data y los algoritmos ya son parte de las políticas públicas que aplica la Provincia de Buenos Aires
El dato surge a partir del paper “Estimación de casos de COVID19 y brotes en directo a partir de llamados telefónicos” publicado en la Royal Society Open Science (RSOS), que lleva la firma de investigadores de la Universidad de San Martín junto a funcionarios del Ministerio de Salud provincial.
Que con la pandemia del Covid 19 nuestra cotidianidad sufrió muchos cambios es una realidad palpable y reconocida por los especialistas de todos los ámbitos. Desde los quehaceres de nuestra vida cotidiana hasta el diseño de las políticas públicas debieron replantearse para hacer frente a los desafíos que se presentaron de un día para el otro.
Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC´s) que ya existían y eran poco utilizadas -salvo en ambientes muy especializados-, fueron adoptadas de manera masiva a nivel personal para seguir desarrollando nuestras tareas laborales, continuar aprendiendo, realizar consultas médicas y hasta mantener vivos nuestros lazos afectivos y familiares. También las organizaciones públicas y privadas encontraron allí la posibilidad de asegurar el cumplimiento de sus cometidos.
Lo propio sucedió con herramientas más sofisticadas como la inteligencia artificial, de la cual se conocía poco y se hablaba menos. Fue nuestro sistema científico nacional y sus distintos componentes quienes rápidamente visibilizaron a las distintas técnicas existentes como capaces de aportar soluciones reales a la creciente complejidad que nos tocaba atravesar como sociedad.
Así se ideó un modelo matemático para aportar eficiencia a la estrategia de control epidemiológico que se estaba llevando adelante en la Provincia de Buenos Aires a través del servicio telefónico 148, que en agosto llegó a evacuar aproximadamente 20 mil consultas diarias, concientizando sobre las particularidades de esta nueva enfermedad, evacuando dudas, reportando casos, y sirviendo al mismo tiempo de referencia para el sistema de salud local.
A partir del trabajo conjunto realizado con la Universidad de San Martín se montó, sobre los datos obtenidos de los llamados telefónicos, un sistema de alerta temprana en tiempo real que permitió a partir de indicadores diarios de aumento de casos – y sin tener que aguardar los resultados de los análisis de laboratorio-, proyectar brotes en cada uno de los distritos de la Provincia de Buenos Aires durante el período comprendido entre abril y junio del año 2020, cuando todavía la línea 148 no estaba sobrecargada. El algoritmo desarrollado fue entrenado tomando los casos sospechosos o de contacto estrecho, en los que el operador del servicio tomaba nota del distrito desde donde se originaba el llamado entrante.
Esto permitió al Ministerio de Salud provincial adoptar medidas de política pública sanitaria e intervenir de manera eficaz y oportuna, como sucedió con el resonado caso de Villa Azul, en el partido de Quilmes. Allí, el seguimiento de los últimos 3 días previos al 20 de mayo indicó que el distrito proyectaba la mayor cantidad probable de casos con relación a su población y al resto de los distritos. Esos datos fueron verificados en el campo a través de un operativo del Programa Detectar, lo que determinó que se decrete su aislamiento por 14 días a partir del 24 de mayo, posibilitando una respuesta rápida y exitosa para controlar la propagación del virus.
Se trata de una de las principales herramientas de monitoreo utilizadas por el sistema de salud provincial durante la pandemia, y sus versiones mejoradas continúan siendo utilizadas para detectar brotes de manera temprana. Incluso se proyecta como un instrumento apto para prevenir otras epidemias capaces de provocar cambios en el comportamiento colectivo como podría ser el caso del dengue.
Si querés acceder al paper publicado podes hacerlo ingresando aquí.